WALTER BENJAMIN EN ISLA DE PAPEL
La nueva serie escrita sobre personajes literarios de la Historia relacionados con la isla de Ibiza, ‘Isla de papel’, que ponemos en marcha de en Ibiza Editions, nos acerca a la figura del filósofo y crítico alemán Walter Benjamin.
Walter Bendix Schönflies Benjamin (Berlín, 15 de julio de 1892 – Portbou, 26 de septiembre de 1940) fue un filósofo, crítico literario, traductor y ensayista alemán de origen judío. Su pensamiento recoge elementos del Idealismo alemán o el Romanticismo, del materialismo histórico y del misticismo judío que le permiten hacer contribuciones perdurables e influyentes en la teoría estética y el marxismo occidental. Su pensamiento se asocia con la Escuela de Fráncfort.
Estudia Filosofía en la Universidad de Berlín donde fue miembro de la «Unión de Estudiantes libres». Traduce obras de Charles Baudelaire al alemán. En la Universidad e Múnich conoce a Rainer Maria Rilke y a Gershom Scholem, que se convertiría en su amigo. Escribe también sobre el poeta romántico alemán Friedrich Hölderlin.
En la Universidad de Bern conoce a Ernst Bloch y a Dora Sophie Pollack (1890-1964), con la que se casaría más tarde. Defendió su tesis Begriff der Kunstkritik in der Deutschen Romantik (El concepto de la crítica de arte en el Romanticismo alemán). Quiso entrar como profesor en la universidad, pero lo rechazaron por ser judío.
Para Benjamin, la salvación de la humanidad está ligada a la salvación de la naturaleza. Quedó fascinado con las obras de Marcel Proust y Charles Baudelaire, observadores natos de la vida. Criticó sin piedad a Hitler, a la teoría fascista, a la hipocresía de la democracia burguesa y al capital financiero e industrial alemán que apoyó al nazismo como forma de contrarrevolución preventiva contra los socialistas.
En 1932, durante la crisis anterior a la toma del poder por Hitler, Walter Benjamin estuvo en la isla de Ibiza. Lo hace en dos ocasiones, como explica Vicente Valero en su libro Experiencia y pobreza, que reconstruye el periodo ibicenco del escritor, enamorado de la isla, y la gran influencia que esta tuvo en su vida y en su obra. Después, se traslada a Niza, donde llegó a pensar en el suicidio, al percibir lúcidamente la importancia sociopolítica y cultural del incendio del Reichstag (27 de febrero de 1933), que significó la asunción de todo el poder por los nazis en Alemania. Desatada la persecución de los judíos y de los marxistas, Benjamin se trasladó a París, tras una estancia en Svendborg, en casa de Bertolt Brecht y en San Remo, donde vivía su exesposa Dora. Escribió a Scholem sobre una fatiga infinita que le invadía.
No pudo volver a Berlín. Buscó el apoyo de los también filósofos marxistas-críticos, Adorno y Horkheimer. Este último le acusó de no ser un buen materialista. Benjamin malvivía con lo que cobraba de esta escuela, por lo que decidió no salir de casa y se aisló social y físicamente. Tras la ocupación de la ciudad por las tropas nazis, huyó de París a España.
En Portbou decide decidió acabar con su vida (en el Hotel Francia) antes que tener que volver a Francia y caer en manos de la Gestapo. Su trágica huida a través de los Pirineos ha inspirado distinto obras, entre la que se encuentra la novela El Pasajero Benjamin, de Ricardo Cano Gaviria, publicada en 1989.
El método de Benjamin ha influido en el modo de investigar de varias generaciones, inspirando algunos extractos de pequeños ensayos trayectorias intelectuales enteras.
Isla de papel (1)
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