LA GLOSA MENORQUINA SERÁ DECLARADA BIEN DE INTERÉS CULTURAL INMATERIAL DE MENORCA
A principios del mes de julio, y por resolución del conseller de Cultura, Educación, Juventud y Deportes del Consell Insular de Menorca, se inició el expediente para declarar la glosa menorquina como un Bien de interés Cultural Inmaterial de Menorca. Dado la relevancia cultural de esta forma literaria, el Consell Insular de Menorca ha considerado oportuno iniciar este procedimiento para unir la glosa menorquina a la vela latina y la técnica constructiva de la piedra en seco, que ya gozan de esa mención en la isla.
LA GLOSA MENORQUINA: PATRIMONIO CULTURAL
En muchísimas culturas del mundo, y desde tiempos inmemoriales, la literatura popular ha tenido un marcado carácter oral. Por consiguiente, abundan las muestras del género del verso improvisado como expresión de la cultura popular. A pesar de las similitudes que tienen estas expresiones literarias en todo el mundo, en cada lugar gozan de unas características particulares que las hacen únicas. En el caso de Menorca, es de gran importancia cultural la glosa menorquina.
La glosa menorquina es, sin duda alguna, una de las formas de expresión literaria más bellas de todo el Mediterráneo. Se trata de una composición de carácter oral y rimada, normalmente improvisada en el momento de la representación, y que va acompañada de una guitarra llamada “ses porgueres”.
ORIGEN Y EVOLUCIÓN DE LA GLOSA MENORQUINA
Se cree que su origen se remonta como mínimo hasta el siglo XVII y que se trataba de una expresión de carácter colectivo y público, generalmente en el ámbito festivo y de celebración. Es un género pensado para compartir y trasmitir historias entre los miembros de la comunidad. Constituían uno de los entretenimientos principales en la sociedad menorquina, especialmente entre las personas del campo.
Miquel Ametller, uno de los impulsores de la glosa menorquina del siglo XX
Durante el siglo XX, la importancia de la glosa menorquina decae y el género pasa a estar en peligro. Sin embargo, con la llegada de la democracia comienza un proceso de recuperación del género como distintivo de la identidad lingüística y cultural de la isla. Gracias al esfuerzo hecho por Miquel Ametller y Esteve Barceló, la glosa menorquina resurgió. Más tarde, en 1999, se fundó la Associació Soca de Mots. Esta se encarga de organizar encuentros, así como de ofrecer formación y hacer investigación sobre la glosa. En la actualidad, cada año participan numerosos glosadores en los encuentros celebrados en Menorca.
Por todo esto, la declaración de la glosa menorquina como Bien de Interés Cultural Inmaterial de Menorca es una gran noticia. Esperemos que esto contribuya a continuar fomentando la promoción y la renovación de este género tan particular y único.
Por Maite Vallejo
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